Los costes de la I+D agroquímica han aumentado notablemente en los últimos años en paralelo al crecimiento de los recursos dedicados a los estudios y los ensayos de campo medioambientales y de toxicidad. Hoy en día, llevar un nuevo producto agroquímico al mercado cuesta entre 100 y 350 millones de dólares y es un proceso que dura, de media, una década.
En gran medida, este aumento de los costes se ha debido a la imposición de requisitos normativos más estrictos, así como a una demanda creciente por parte de los consumidores de prácticas agrícolas y productos de protección de cultivos más respetuosos con el medioambiente. Las empresas agroquímicas que exportan a mercados como Estados Unidos, el Reino Unido y Brasil se enfrentan a normativas más rígidas para la exportación de materiales, lo que significa que los formuladores pueden tener que depurar y adaptar las formulaciones para cumplir los estándares más recientes de estos territorios.
Mientras tanto, las dudas del público sobre la seguridad de los herbicidas están obligando a las empresas agroquímicas a desarrollar alternativas a los productos existentes. Los numerosos titulares recientes sobre las formulaciones que contienen glifosato, por ejemplo, subrayan la importancia de intensificar la investigación sobre formulaciones que den respuesta a las exigencias de los consumidores. Esto contribuye, a la vez, a proteger la reputación de las marcas y a mantener la cuota de mercado.
Ante estas tendencias dominantes en la industria, los formuladores se ven sometidos a una presión creciente para acelerar el desarrollo de formulaciones eficaces y seguras desde el punto de vista medioambiental. ¿Cómo puede optimizar la eficiencia y la rentabilidad de sus flujos de trabajo de I+D de formulación?
Depure su estrategia de selección de ingredientes antes de las pruebas
En Estados Unidos, Europa y Brasil, la protección de los cultivos exige el control de un amplio conjunto de plantas e insectos específicos de cada cultivo y cada región. Dado el aumento de los costes del desarrollo de productos, reunir datos fiables para definir el diseño antes de iniciar las pruebas de campo y los estudios de seguridad, que consumen una gran cantidad de recursos, se ha convertido en una estrategia cada vez más importante para ahorrar costes. La investigación en línea es un componente esencial del desarrollo de formulaciones que permite diseñar formulaciones de prueba basadas en los datos extraídos de la información sobre productos y las fuentes bibliográficas existentes.
Sin embargo, este proceso es, en la mayoría de los casos, complejo y requiere mucho tiempo. Hace falta una cantidad considerable de investigación para identificar compuestos de partida para el diseño de formulaciones y para evaluar los ingredientes activos e inertes, y esos datos suelen estar escondidos en las publicaciones. Aunque los títulos y resúmenes son un buen punto de partida, los datos presentados en el cuerpo de las publicaciones no siempre son relevantes. En algunos casos, la información está incompleta y es necesario investigar más para determinar si los resultados tienen validez en otras condiciones.
Al comprar materiales, por ejemplo, los detalles y la información de los ingredientes se suelen obtener de distintos proveedores. Es necesario contrastar las especificaciones con los requisitos normativos y de seguridad de las distintas regiones en las que se usará el producto. Cuando se usan herramientas de búsqueda básicas y bases de datos y bibliotecas de contenido no seleccionadas, el proceso puede llevar más tiempo y requerir varios intentos para obtener respuestas fiables a las consultas de búsqueda.
La I+D agroquímica es, por definición, un proceso iterativo en el que las pruebas de laboratorio condicionan la estrategia de desarrollo. Sin embargo, una investigación más sólida en las primeras fases puede reducir la necesidad de iteraciones posteriores, que pueden ampliar los plazos y consumir más recursos a la larga.
El uso de Formulus® facilita el acceso a los datos para los formuladores agroquímicos
El énfasis creciente en la seguridad alimentaria y de los aplicadores, incluida la exposición de los operarios en la industria agroquímica, ha llevado a dar prioridad a los productos de protección de cultivos respetuosos con el medioambiente. Formulus ofrece a las empresas de I+D agroquímica una ventaja competitiva proporcionándoles datos valiosos procedentes de patentes que incluyen los resultados de pruebas experimentales, algo que va mucho más allá de la información facilitada en las revistas científicas.
Estos datos pueden ayudar a las empresas a optimizar el desarrollo de las formulaciones para la protección de los cultivos. Descubra cómo se consigue leyendo nuestro caso práctico más reciente, en el que exploramos los procesos empleados para controlar el Amaranthus palmeri con el fin de proteger las cosechas de maíz y la salud de los consumidores.